La valeriana (Valeriana officinalis) Su principal uso está relacionado con los trastornos del sueño y su consumo es habitual, sobre todo, entre quienes padecen insomnio.
De esta planta se utiliza la raíz, con la que se puede elaborar: infusiones, maceraciones, tinturas y extractos.
Propiedades comunes de la valeriana
Sedantes: Contra transtornos nerviosos y depresivos- palpitaciones, espasmos, vómitos, hinchazon intestinal, agotamiento nervioso, estrés, etc – Hacer uan infusión de unos 15 gramos de la raíz de la valeriana, se deja reposar durante toda la noche.
Hipnóticas: Favorece el sueño. Hacer una infusión de la raíz de valeriana fresca antes de irse a dormir.
Es útil tomar agua de valeriana, para tratar dolores estomacales, los clásicos retortijones, cuadros diarreicos, en especial aquellos desencadenados luego de cólera, tensiones, preocupaciones, lo que popularmente se conoce como ‘colerín’.
Antiparasitario. La valeriana también tiene la virtud de eliminar parásitos, especialmente los de áscari lumbricoides (lombrices) para eliminarlos, machaque una raíz y añádale dos tazas de agua fría, deje al sereno. Tome 2 tazas diarias por 3 días.
Para el dolor de cabeza, corte trocitos de valeriana de 1 cm de espesor y colóquelos en la frente y en las sienes. Sujete con un pañuelo y descanse 20 minutos.
Para los cólicos, la valeriana también es un buen remedio. Si tiene cólicos estomacales frecuentes. Tomar una o dos tazas de infusión de valeria al día.
Ayuda a disminuir el estrés.
Ayuda con la depresión.
Ayuda en casos de fatiga crónica.
Para casos de hiperactividad y trastornos de de deficit de atención.
Para los dolores menstruales.
Recomendaciones
A la hora de utilizar la valeriana tener mucho cuidado en la dosis suministrada ya que el abuso de esta sustancia puede provocar varias alteraciones en algunas personas.
Efectos secundarios del uso de la valeriana:
Dolor de cabeza
Intraquilidad
Excitabilidad
Lentitud
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